La Rosa de los Vientos

 

Aquí estamos.... en la barriguita de Mami Naturaleza en un planeta llamado Tierra.¿Qué os parece?

No nos están poniendo música de Mozart ni Vivaldi  y se está moviendo mucha contaminación por el cordón umbilical que nos une a Mamá. No sé exactamente cuántos siglos de gestación llevamos porque se cuentan tantas cosas que no salen las cuentas...

¿Hacia dónde vamos?  Necesitamos mapas, rutas, distancias... símbolos para representar  y manejar el territorio a explorar.

¿De dónde venimos?  Sabemos que nuestra experiencia de vida es un territorio para el cual nos han "regalado" durante mucho tiempo una incompleta cartografía que tiene muchos errores (y muchas mentiras). 

¿Dónde estamos? Algunas respuestas externas gritan que estamos perdid@s, cayendo en abismos de crisis y dándonos golpes de desesperación hacia un final sin perdices. ¿Un aborto de Humanidad?

Después de tanta mentira ¿por qué habríamos de creer que el GPS del sistema nos da las coordenadas correctas? Mi interior me dice que es un eco golpista de nuestros estados mentales, físicos, emocionales y de conciencia y que la realidad es H_otra.

Dentro de nuestro Interior también tenemos nuestros mapas donde es muy posible que encontremos muchas de las respuestas que estamos buscando.

Uno de esos mapas es la Rosa de los Vientos. 

En diferentes culturas se ha dado significado común a los puntos cardinales. De una forma metafórica (o real) se describen las relaciones entre las distintas facetas que conforman nuestro Ser y Estar, proporcionándonos cada una de ellas, y entre todas, las habilidades necesarias para salir de cualquier atolladero.

Así por ejemplo, se toma el Norte como símbolo del Aire, donde encontramos nuestro "Guerrer@ Interior", dispuest@ a protegernos en la exploración de nuevas rutas.

El Sur, símbolo de la Tierra, símboliza nuestr@ "Madre-Padre Interior",  encargad@s de nuestra crianza y cuidados en el camino.

En el Oeste, símbolo del Agua, está nuestr@ "Niñ@ Interior", el perfecto explorador al que todo le interesa  y que además es un aprendiz feliz porque aprender es un juego.

Al Este, símbolo del Fuego, nuestra "Conciencia Interior", la conexión con todas las fuerzas del universo, al que pertenecemos. La dimensión donde lo físico, lo mental y lo emocional interactúan en una geometría triangular desplegable en múltiples dimensiones (fractal y holístico). 

Concentremos por un momento toda nuestra esencia en un punto que contenga todas las energías de nuestra Naturaleza. Y desde ahí lanzamos un radio de acción, donde podemos empezar a reconocer nuestras facetas.

Miro al Norte y respirando ese Aire fresco me lleno de fuerzas para afrontar mi camino.

Miro al Sur y con los pies bien puestos en la Tierra, cuido mi hogar: alimento, cobijo y compañía.

Miro al Oeste y chapoteo con la ternura y la inocencia de la infancia, maravillándome con cada gota de Agua.

Y miro al Este, desde donde el Fuego me permite hacer fértiles las cenizas de un volcán. Ave Fénix, l@s que Somos y Estamos en la vida te saludamos.

De esta forma hemos creado un nuevo diámetro de posibilidades desde el centro de un@ mism@. Crecemos.

¿A qué jugamos? 

Mientras la vida nos sigue nutriendo desde el ombligo en ese vientre materno, Hoy, que ya es de noche, me apetece irme a soñar con la Rosa de los Vientos, a ver qué me cuentan mis sueños.

Cada mañana , al despertar, el Amanecer nos saluda dispuesto a jugar con la Rosa de los Vientos. ¿Jugamos?